El Valle blanco.
La época más bonita del año.
Dicen que en primavera la sangre altera y lo que también nos altera es la preciosidad del Valle del Jerte. Como buena habitante del Valle del Jerte de familia autóctona vengo a hablaros del maravillo espectáculo que nos regala el Valle todas las primaveras y esta no iba a ser de menos.
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Como mucha gente sabe, el Valle del Jerte es conocido como un paraíso natural ya sea por sus maravillosas gargantas como lo son las Nogaledas o la Garganta de los Infiernos más conocida como Los Pilones, pero el verdadero espectáculo que tiene una duración de más o menos 10 días es la floración de todos nuestros cerezos, dejándonos un precioso manto blanco cubriendo nuestra zona.
Pero lo que no se sabe, o poca gente lo sabe, es el origen de este suceso y el porqué aterrizaron los cerezos en el Valle del Jerte que tan conocido lo hacen por ello.
La realidad es que los cerezos no provienen, ni son autóctonos del Valle del Jerte, más bien provienen de las montañas del Cáucaso entre el Mar Negro y el Mar Caspio. Fueron los árabes quienes extendieron las plantaciones de cerezo mejorando sus técnicas de injerto y es así como llegaron al Valle las cerezas. Tras la expulsión de los moriscos, su cultivo siguió en manos de los nuevos colones.
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Muchos pueblos antiguos disfrutaron del placer de comer cerezas. En algunas culturas, como las japonesa, las cerezas simbolizan el autosacrificio (como el sacrificio de cogerlas, porque tela el trabajito). Por el contrario, en la tradición cristiana medieval, la cereza tuvo el mismo simbolismo que la manzana como el fruto prohibido.
Los primeros documentos del cultivo en el Valle del Jerte se remontan sólo al S. XIV. El 2 de junio de 1352 varios emisarios del rey de Navarra, que se dirigían a Sevilla para la entrevista de Pedro I, pasaron la noche en Cabezuela del Valle y durante la cena les sirvieron truchas y cerezas.
En el S. XVIII varios cronistas señalan la riqueza frutícola del Valle del Jerte. En el S. XIX las cerezas del Jerte ya gozaban de fama y eran consumidas en la Corte, según refiere Sebastián Miñano. El cultivo de los cerezos se desarrolló por todo el Valle, y en el S. XX alcanzó su máxima expansión.
Hasta el día de hoy que hicieron de nuestro producto Denominación de Origen (DO).
Bibliografía:
https://www.balansiya.com/ingredientes_cerezas_jerte.html
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